
Alma Narbona, Rafael Arcos y Juan Fernando Holgado.
Durante los días 10,11 y 12 de Febrero tuvo lugar un Clinic de Doma Vaquera impartido por Rafael Arcos. La organización corrió a cargo del conocido jinete Juan Fernando Holgado Estrada en las magníficas instalaciones del Centro Ecuestre «El Juncal» en Jerez de la Frontera. Un intenso fin de semana que no quisieron perderse casi un centenar de personas a pesar de que el tiempo nos deparó tres lluviosas jornadas.
El número de caballos estaba limitado a seis y las plazas de oyentes eran ilimitadas hasta completar aforo. Las jornadas comenzaban a las 9 de la mañana con la entrada del primer jinete en pista bajo la atenta mirada de Rafael Arcos que me cuenta: «la

«Para ser irremplazable, uno siempre debe ser diferente»
finalidad del clinic es darle a cada jinete unas pautas individualizadas para que este las ponga en práctica en su día a día y vaya evolucionando con su caballo.La mayoría de jinetes traen un problema concreto que en muchos casos se resuelve durante las tres jornadas, otros jinetes vienen para afianzar conocimientos o para que les vea trabajar con sus caballos y les ayude a mejorar determinados ejercicios»
Los participantes como oyentes en el Clinic también tienen su momento para preguntar sobre lo que se está trabajando en pista o cualquier duda que traigan de casa: Rafael responde a todos. Incluso en los descansos para desayunar y almorzar visiona vídeos de oyentes que quieren que vea como evoluciona su caballo…Las jornadas son muy intensas todos los jinetes destacan el grado de empatía e implicación de Rafael que no duda en subirse a un caballo si lo considera necesario porque algo no termina de ir bien.
«Tenía un problema con mi caballo, no se conectaba en la rienda izquierda -me cuenta Borja uno de los asistentes- y en esos tres días solucionamos bastante. Rafael me llamó después del clinic para ver como seguía trabajando y qué tal respondía el caballo. Siempre le estaré agradecido»
Para Juan Luis, otro de los participantes, el poder trabajar con su caballo bajo la supervisión de Rafael ha sido muy gratificante: «En los ejercicios al paso es dónde más hemos evolucionado, un maestro como él te trasmite mucha seguridad. Sigo trabajando con las directrices que él me ha dado»
«Que nadie se engañe: un caballo no se doma en tres días, ni en tres años. La doma es un proceso lento, donde hay que ser constante y disciplinado, afianzar muy bien los conocimientos y las prisas son siempre malas consejeras. Ir despacio es estar seguro de llegar pronto» así de claro y rotundo se muestra Rafael Arcos, no es de extrañar que esté en lo más alto.
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